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jul
Santa Eulalia de Abamia

10 lugares en Cangas de Onís que te conquistarán


¿Sabías que en Cangas de Onís se esconde un dolmen del 3.000 A.C.? ¿Que la primera iglesia cristiana tras la invasión árabe se levantó en esta localidad? ¿O que según las leyendas algunas de sus cuevas estuvieron habitadas por seres mitológicos? Si no conoces Cangas de Onís o si quieres “redescubrir” sus muchos encantos, esta lista te ayudará a sacarle el máximo partido a tu visita.

Cangas de Onís, primera capital del Reino de Asturias, es uno de los concejos con mayor patrimonio histórico-artístico del Principado de Asturias. Un enclave sin el que no se entendería la historia de España.

1. El Puente Romano. Sin duda, la joya de la Corona de la localidad. La foto por excelencia. Conocido como “El Puentón” y declarado Monumento Histórico Artístico en 1931, esta construcción sobre el Río Sella, fue erigida durante el reinado de Alfonso XI de Castilla, sobre una edificación romana anterior. De su famoso arco peraltado central cuelga una reproducción de la Cruz de la Victoria, símbolo del Principado de Asturias, presente tanto en su bandera como en su escudo.

2. La Ermita de la Santa Cruz. Se trata del primer templo cristiano de Asturias y, posiblemente de la Península, tras el inicio de la Reconquista. La Ermita de la Santa Cruz fue ordenada construir en el año 737 por el Rey Favila, hijo de Don Pelayo. Su nombre se debe a que durante un tiempo albergó la cruz de roble que Pelayo portaba en la Batalla de Covadonga y que más tarde se convertiría en La Cruz de la Victoria.

Ermita de Santa Cruz

3. El Dolmen de Santa Cruz. Situado en el interior de la ermita de la Santa Cruz, este monumento funerario está formado por un montículo artificial en cuyo interior se localiza una cámara sepulcral compuesta por varias lajas de piedra. Se cree que Favila erigió el templo sobre el dolmen por tratarse de un lugar sagrado y mágico para su pueblo.

4. La Cueva de Covadonga. A pocos kilómetros de Cangas de Onís se sitúa el Santuario de Covadonga, escenario de uno de los capítulos más importantes de la historia de España. Allí, en el 722, Pelayo, Príncipe de los Astures, logró la primera victoria de los cristianos sobre las tropas musulmanas y marcó el inicio de la Reconquista. La gruta del Monte Auseva donde se refugiaron los astures se convirtió, tras la batalla, en lugar de culto a la Virgen María, a quién las crónicas de la época otorgan un papel destacado en la victoria. Hoy, una imagen de la Virgen de Covadonga, conocida como La Santina”, preside esta cueva que alberga una pequeña ermita y de la que surge una cascada.

Cueva de Covadonga5. La Basílica de Santa María la Real de Covadonga. A escasos metros de la gruta, en una colina, se encuentra la Basílica de Covadonga. Esta construcción neorrománica, levantada entre 1877 y 1901, fue un empeño personal del rey Alfonso XII que con su edificación, buscaba honrar a la Virgen de Covadonga. El templo, ideado por Roberto Frassinelli, está construido íntegramente con piedra rosa caliza procedente de las inmediaciones.

6. El Monasterio de San Pedro de Villanueva. Tras la prematura muerte del rey Favila atacado por un oso, su cuñado y nuevo rey Alfonso I, mandó levantar sobre los cimientos de su palacio, un templo para honrar su memoria. En el siglo XII, la orden de los benedictinos convirtió la primitiva edificación en el Monasterio de San Pedro, uno de los mejores ejemplos del Románico asturiano. En la actualidad, este enclave, declarado Monumento Histórico Artístico en 1907, alberga el lujoso Parador de Cangas de Onís.

7. La Cueva del Buxu. Descubierta en 1916, se cree que su nombre original era Cueva del Bruxu –brujo en bable- debido a que su carácter mítico hizo pensar a los lugareños que en la gruta habitaba un hechicero. Pero el valor de esta cueva se debe a que conserva en su interior una rica representación de arte parietal perteneciente al Solutrense y principios del Magdaleniense. La gruta contiene pinturas y grabados de caballos, cabras, ciervos y bisontes, así como representaciones geométricas y zoomórficas. Entre los principales hallazgos de este yacimiento destaca el de una escultura de un pájaro tallada en un colmillo de un oso de las cavernas. Se trata de la escultura en tres dimensiones más antigua de la Península.

8. La Cueva del Cuélebre. El cuélebre es una de las criaturas más destacadas de la mitología astur. A medio camino entre un dragón y una serpiente alada, se le atribuye el papel de guardián de tesoros y personajes encantados. A escasos kilómetros de Cangas, en el pueblo de Corao, se encuentra esta cueva que según dicen las leyendas locales estuvo habitada por este ser mitológico. En la gruta se han hallado restos de la Edad de Bronce.

image_gallery-49. Santa Eulalia de Abamia. Otro de los puntos de interés de Corao. En este templo se han descubierto restos arquitectónicos anteriores al siglo VIII que vienen a verificar el origen que la tradición popular le otorga como edificación ordenada por el mismísimo Pelayo. De lo que sí existe constancia es de que el primer rey astur y su esposa Gaudiosa estuvieron enterrados en esta iglesia hasta que Alfonso X ordenó el traslado de sus restos a Covadonga. El templo, de estilo románico-gótico está ubicado en un paraje bellísimo, rodeado de tejos centenarios.

10. Estatuas de Don Pelayo. Una visita a Cangas de Onís quedaría incompleta si el visitante no ‘conoce’ al personaje que lo originó todo. Existen dos opciones: visitar la estatua de bronce de Don Pelayo situada en la explanada de Covadonga, obra de Eduardo Zaragoza; o acercarse a la que, construida en piedra, está ubicada en los jardines de la iglesia parroquial de Cangas, realizada por Félix Alonso.

Estos son sólo diez de los lugares con más encanto de Cangas de Onís, si tú conoces alguno más, te invitamos a que nos lo descubras.